En 2024, el nivel de dificultad e incertidumbre subió dos o tres niveles debido a la recesión de la economía argentina, que generó una baja significativa en las ventas durante los primeros meses del año. A esto se le sumó un aumento constante de los costos (energía, alquileres, materias primas, salarios e impuestos). Hoy, no alcanza con vender la misma cantidad de unidades o servicios que el año pasado, ya que el mercado está muy sensible al aumento de precios. Ante este panorama, ¿qué pueden hacer las pymes argentinas para sobrevivir y prosperar?

¿Sabías que podrías ahorrar hasta un 30% de tu tiempo automatizando tareas repetitivas?
Mi primer ahorro de tiempo fue lograr automatizar un mail, que se disparaba cada vez que alguien completaba un formulario inicial. Ese correo sale usando los datos de los campos que me habían proporcionado, luego pasé a enviar correos cuando cada cliente pasaba a la siguiente etapa o los correos con facturas. Desde entonces, paso horas diseñando las automatizaciones de muchos procesos de mi trabajo.

La construcción de equipos sólidos y la retención de talento se han convertido en factores claves para el éxito de cualquier organización. A medida que las empresas crecen y se expanden, enfrentan el desafío de atraer y retener a los mejores profesionales, manteniendo al mismo tiempo una cultura organizacional sólida. En esta nota, explicaremos los momentos estratégicos para abordar estos desafíos, basados en las recomendaciones de una mentoría senior a una de nuestras empresas fortalecidas.

En este post encontrarás información útil y algunas preguntas sobre las dos primeras dimensiones de las seis en las que tu proyecto deberá adentrarse para este viaje emprendedor de buscar generar productos y servicios que resuelvan problemas de nuestras comunidades.
La dimensión personal incluye la atención a las necesidades, expectativas y capacidades individuales. La dimensión relacional hace referencia al equipo promotor, así como al cuidado de las relaciones que establecemos en el proyecto, los procesos de apropiación colectiva, y las formas con las que tomaremos las decisiones.

A lo largo de estos últimos años, escuchamos hablar con frecuencia de la Inteligencia Artificial (IA) y de cómo la implementación de esta tecnología de la nueva era, desde su existencia hasta ahora, ha generado impactos positivos en las empresas, la sociedad y el mundo. Impactos positivos, tales como, el desarrollo de soluciones para mejorar la salud del suelo, para mejorar la eficiencia y sostenibilidad de la agricultura, para detectar y prevenir la contaminación del agua, para capturar el dióxido de carbono en la atmósfera, o para reducir las emisiones de contaminantes. Se trata de un fenómeno que llegó para quedarse…

Hoy atravesamos la “cuarta revolución industrial” basada en los avances en inteligencia artificial, la exploración espacial, la robótica y los desarrollos de tecnologías innovadoras. Cada día amanecemos con nuevos desarrollos con el potencial de transformar nuestro mundo tal y como lo conocemos.

Darle forma a nuestra misión no fue una tarea sencilla. Quizás hoy podemos citar rápidamente, pero para llegar a ella nos transformamos, decidimos nuevos nortes, nos repensamos y le dimos la vuelta al mundo, aunque en más de 180 días. Existe un proverbio africano que dice (en nuestras palabras) que si querés ir rápido podés […]

Algunos emprendimientos arrancan por una necesidad clara a resolver. En otros casos, existen emprendedoras que dan su primer paso en el mundo del emprendedorismo porque algo les generó una inquietud o un poco de curiosidad. 

Para Pau de Solhé, una de las emprendedoras que formó parte de nuestra Incubadora en 2019, todo comenzó a partir de un simple interrogante. En esta quinta entrega charlamos con ella sobre sus experiencias en ese camino y el significado de cada paso dado.

*FICHA TÉCNICA*

Nombre (o cómo te guste que te llamen): Pau Prado.

De dónde sos: De Mendoza Capital.

Nombre y actividad principal de tu emprendimiento: En Solhé Carga Solar nos dedicamos a brindar soluciones a través de energía solar (térmica y fotovoltaica) para casas, industrias y eventos.

Años de vida del emprendimiento: 6 años (aunque yo me incorporé hace 2).

1. ¿Qué te motivó a emprender? 

“Primero que nada siempre me llamó la atención, sobre todo cuando entré a la facultad a estudiar Ingeniería Industrial. Como estudiantes lo primero que pensamos es en terminar trabajando en una multinacional pero después en el camino me crucé con una materia opcional que se llamaba “emprendedorismo”. Esta materia me abrió la cabeza y me hizo pensar de que había otras opciones que antes no se me hubieran ocurrido, pero aún así sentía miedo de tener que hacerlo sola, de tener que pensar ideas super elaboradas y no ser capaz, cuando en realidad a veces en las ideas más sencillas están las grandes soluciones. 

Esto fue en el año 2017, en el 2018 conozco a Nicolás, que es quien comenzó con el emprendimiento (aunque antes de ser socio, fue mi novio) y en esa oportunidad pude notar que mi interés continuaba aunque me seguía pareciendo un camino difícil. Comencé solo ayudándolo como compañera y entre una cosa y otra, terminé trabajando más oficialmente a principios del 2019.”

2. Quizás existió algún que otro día difícil ¿Qué te mantuvo enfocada? ¿Qué aprendiste de esos momentos? 

“Sí, la verdad que muchos días difíciles. Sobre todo porque cuando los avances dependen de una misma, si se presenta un problema, lo tenés que resolver. Obviamente, siempre hay equipos de trabajo que te acompañan, pero hay decisiones que tenés que tomar, que son determinantes y a veces puede ser incómodo porque en ocasiones aún estamos aprendiendo. 

Enfocada me ha mantenido la responsabilidad de buscar soluciones para esos momentos difíciles, sabiendo que eso dependía de nosotros, de los socios. Con ello aprendí que no hay que desesperarse, la he llegado a pasar bastante mal ante situaciones inesperadas, por suerte y poco a poco he ido aprendiendo a confiar en lo hacemos.”

3. ¿Cómo ves el rol de las mendocinas en el ecosistema emprendedor local? 

“Hay muchas mujeres emprendedoras y en los más diversos mercados (desde tecnología hasta gastronomía). En Mendoza se potencia cada vez más la red de emprendedoras, incluso me asombro de quienes se han animado a hacerlo solas, porque yo trabajo con un equipo de 3 o 4 personas, pero hay muchas que hacen todo en solitario.”

4. ¿Hubo otres emprendedores que te ayudaron a marcar el camino? ¿Querés contarnos quiénes? 

“Sí, sobre todo durante una experiencia PROESUS (de hecho allí conocí a DRIMCOM) en la que tuvimos la oportunidad de compartir tiempo y experiencias con emprendedores de todo el país y con gente que estaba en nuestro rubro (por ejemplo de Buenos Aires, con quienes mantenemos contacto hasta el día de hoy, nos pasamos proveedores y nos consultamos dudas). 

En esa oportunidad aprendimos mucho, pudimos sentir el compromiso y la buena voluntad de los demás emprendedores y las ganas de crear un ambiente colaborativo entre todos. Nos sentimos acompañados y hasta en deuda, por no saber cómo devolver tanta amabilidad que estábamos recibiendo.”

5. ¿Qué les dirías o cómo crees que podemos empoderar a otras mujeres para que se animen a convertir sus proyectos en ideas de negocio? 

“Que no tengan miedo. Quizás en mi caso fue fácil al inicio, porque de no haber conocido a alguien que ya había montado un emprendimiento no sabemos si me hubiese animado a dar el primer paso sola. Sin embargo hoy sé que hubiese sido capaz de hacerlo, todas tenemos esa capacidad y mucho más si se trata de proyectos o de ideas que nos gustan o que buscan hacerle un bien a nuestra comunidad.”

6. ¿Qué le dirías a la Paula anterior a Solhé? 

“Que no tenga miedo y que no dude de qué es capaz, que hoy mirando hacia atrás podemos ver todas las decisiones y toda la experiencia vivida.”